Una maravillosa y valiente mujer rumana llamada Adriana Iliescu. Dio a luz a los 66 años de edad en el 2005. Esta mujer quedó oficialmente registrada como la madre más vieja del mundo en el Libro Guinness de los récords (una mujer española dio a luz a gemelos a los 67 años de edad, por lo que Adriana no mantuvo el récord por mucho tiempo).
Adriana se casó una sola vez y su matrimonio duró cuatro años. A los 24 años de edad, se divorció de su esposo y llevaba 50 años sola. Dijo que siempre había querido tener hijos, pero nunca tuvo una pareja que fuera el padre de sus hijos. Además, tenía que estudiar y trabajar duro porque nadie la apoyaba.
En el año 2000, en Rumania, las clínicas comenzaron a ofrecer tecnología de fecundación in vitro. Gracias a este método, Adriana quedó embarazada y dio a luz a su primer hija, Elisa
Los medios de comunicación locales afirmaron que la bebé nació completamente sana. Los periódicos andaban muy sorprendidos por la edad de la madre, así que dieron a conocer este hecho en todo el mundo.