José María Morelos.– La violencia y la impunidad contra los animales vuelven a manchar a la comunidad de La Candelaria, donde un perro fue brutalmente atacado con un machete por el vecino M. C. A., provocándole una herida de ¡20 centímetros en el cuello!
El can, propiedad de J. P. C., tuvo que ser sometido a atención veterinaria de urgencia, con un costo de 2 mil 260 pesos para salvarle la vida. Sin embargo, lo verdaderamente indignante llegó después: al acudir con el delegado municipal, Carlos Hernán Pacheco Chan, el agresor se “arregló” con el dueño del animal devolviendo únicamente mil pesos, una cantidad ridícula frente al daño ocasionado.
El acuerdo fue firmado por ambas partes, como si la vida de un ser vivo pudiera reducirse a un simple papel y un puñado de billetes. Lo más alarmante: no hay denuncia formal por maltrato animal ni se sabe si las autoridades competentes intervendrán. Una muestra más de la ausencia de justicia y de lo poco que vale la vida animal en la región.
Como si no fuera suficiente, en la cabecera municipal otro perro fue reportado con síntomas de rabia, pero al llegar las autoridades descubrieron que apenas tenía signos vitales. El dueño sospecha que fue envenenado, otro acto cobarde que parece quedar también en la impunidad.
La comunidad exige respuestas: ¿hasta cuándo seguirá tolerándose esta barbarie? ¿Dónde están las autoridades que deberían garantizar protección contra el maltrato animal?