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El Arsenal del Progreso de Víctor Alfonso Gordillo Morales: Machetes, Palas y un Pico para Salvar a Tzimol

por Boom FM Staff

Redacción / Boom Fm Staff

¡Qué emocionante noticia! El presidente municipal de Tzimol, Víctor Alfonso Gordillo Morales, ha demostrado una vez más su compromiso inquebrantable con el desarrollo y la modernización. ¿Cómo? Equipando al equipo de SAPAM con un arsenal digno de una película de acción: unos cuantos machetes, dos palas, dos barretas y un pico. ¡Toda una inversión millonaria! Claro, porque ¿qué mejor manera de resolver los problemas de agua y servicios básicos que con herramientas que parecen sacadas de una película de los años 50?

Mientras la población sufre la falta de agua y servicios esenciales, nuestro querido edil no duda en proclamar que “Tzimol va con todo”. Y sí, va con todo… directo al desastre financiero. ¿Será que las arcas municipales están tan bien equipadas como el SAPAM? Porque, al ritmo que vamos, no sería extraño ver a Tzimol en bancarrota, pero eso sí, con un pico y dos palas para cavar su propia tumba económica.

Y no podemos olvidar el intrigante caso del director de obras, ese hombre de confianza que, según los rumores, decidió tomarse unas vacaciones no planeadas. ¿Prófugo? ¿Escondido? ¿Relacionado con grupos de dudosa reputación? ¡Qué emocionante! Parece que Tzimol no solo tiene problemas de agua, sino también su propia telenovela de corrupción y desapariciones misteriosas. Mientras tanto, el presidente municipal sigue haciendo malabares para ocultar la ausencia de su compinche, como si fuera un mago distrayendo al público con una mano mientras la otra vacía las arcas.

La pregunta que todos nos hacemos es: ¿quién se está embolsando el verdadero recurso? Porque, claramente, no son los ciudadanos de Tzimol, que siguen esperando soluciones reales mientras el presidente juega al constructor con herramientas de la era preindustrial.

En fin, Tzimol va con todo… con todo, menos con transparencia, eficiencia y un plan real para mejorar la vida de sus habitantes. ¡Bravo, señor presidente! Su legado será recordado como el de un visionario… o quizás como el de alguien que confundió un machete con una varita mágica.

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