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Cintalapa: Un paraíso de seguridad (según el alcalde) Ernesto Cruz, pero hasta es cómplice de crímenes

por Boom FM Staff

Boom Fm Staff

Cintalapa, Chiapas.- Qué bonito es vivir en Cintalapa, un municipio donde el crimen organizado tiene más infraestructura que el propio ayuntamiento. Cámaras de vigilancia, retenes de revisión y hasta un sistema de cobro de piso tan eficiente que hasta las gasolineras tienen su propia suscripción mensual. Y todo esto, según los rumores, bajo la atenta mirada (o más bien, el cómodo descuido) del alcalde Ernesto Cruz.

Es difícil de creer, ¿verdad? Que un alcalde con dos periodos en el cargo no se haya enterado de que su municipio se ha convertido en el centro de operaciones de grupos delincuenciales. Pero, claro, ¿quién iba a notar esos pequeños detalles como retenes ilegales, cámaras de seguridad manejadas por delincu*ntes y empresarios llorando por el cobro de piso? Seguro eran solo “rumores malintencionados” o “fake news”.

Lo más gracioso es que los empresarios del ramo gasolinero sí denunciaron el cobro de piso. Pero, al parecer, en Cintalapa las denuncias ciudadanas van directo a la papelera de reciclaje del ayuntamiento. O quizás el alcalde estaba demasiado ocupado en… ¿qué hace exactamente? Porque no parece que estuviera ocupado en garantizar la seguridad de su gente.

Y mientras tanto, los delincu*ntes se paseaban como si fueran los dueños del pueblo. Con cámaras de seguridad que les permitían monitorear cada movimiento, retenes para controlar quién entraba y salía, y un sistema de cobro de piso tan organizado que hasta daría envidia a Hacienda. Todo esto, por supuesto, sin que el alcalde se diera por enterado. ¿O sí se enteró? Ahí es donde la cosa se pone interesante.

Los ciudadanos, hartos de vivir en un municipio que se hunde en la violencia, exigen que se investigue al alcalde por sus posibles nexos con el cr*men organizado. Porque, vamos, ¿es coincidencia que todo esto ocurra bajo su mandato? ¿O será que en Cintalapa el “crimen organizado” y el “gobierno organizado” son dos caras de la misma moneda?

Mientras tanto, Cintalapa sigue siendo el ejemplo perfecto de cómo un municipio puede convertirse en un paraíso para el cr*men, con la complicidad (o incompetencia) de quienes deberían protegerlo. Bravo, señor alcalde, bravo. Su legado será recordado… aunque no precisamente por las razones que usted esperaría.

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